Gibón de Müller

Al igual que su pariente, el Gibón de manos blancas, el Gibón de Müller se mueve estupendamente a través de los árboles, saltando de rama en rama en lo que se conoce como braquiación. Increíble trapecista, sus piruetas le provocan no pocas lesiones.

Procede de la isla asiática de Borneo y es un simio diurno que se mueve en selvas tropicales. La coloración de su cuerpo varía, y puede ir del gris al café (la parte superior es más oscura que el resto del cuerpo). Machos y hembras presentan una morfología muy similar.

Los gibones de Müller viven en grupos familiares formados por los padres y la prole. El macho es el que delimita el territorio, acústicamente, con sonoros cantos matutinos. De noche, buscan una rama donde descansar y se sientan, apoyados en unas callosidades isquiáticas situadas en sus nalgas que les sirven de almohadilla.

Monógamos, alcanzan la madurez sexual a los ocho o nueve años. A juzgar por la información existente, no parece que exista un pico estacional de nacimientos.

Las frutas maduras y ricas en azúcares (higos) forman parte de su dieta; también comen, pero en menor cantidad, hojas a insectos.